¿QUÉ es el pioderma gangrenoso?

El pioderma gangrenoso es una afección rara que causa la aparición de úlceras grandes y dolorosas en la piel. Si bien estas úlceras pueden persistir durante mucho tiempo y reaparecer una y otra vez, no son contagiosas. 

El pioderma gangrenoso es más común en adultos de 20 a 50 años. Las úlceras se localizan con mayor frecuencia en las piernas, los pies o el tronco, pero pueden aparecer en cualquier parte de la piel.

La apariencia de la condición puede variar. Las úlceras a menudo comienzan a aparecer como granos, bultos o ampollas, y en unos pocos días pueden crecer y abrirse, lo que da como resultado una úlcera que puede supurar líquido. Los bordes de la úlcera pueden verse de color púrpura y tener una forma irregular.

Otros síntomas de pioderma gangrenoso incluyen fiebre, molestias y dolor articular y/o muscular.

A continuación, le mostramos un ejemplo de cómo puede evolucionar el pioderma gangrenoso en la piel:

¿QUÉ causa el pioderma gangrenoso?

Se desconoce la causa exacta del pioderma gangrenoso. En algunos casos, puede comenzar después de que una persona se lesione la piel (corte, quemadura, hematomas, cirugía, etc.). 

Se sabe que ciertas condiciones están asociadas o aumentan el riesgo de una persona de tener pioderma gangrenoso: 

• Enfermedad Inflamatoria Intestinal:  Personas con una enfermedad del tracto digestivo como colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
• Artritis: Personas con artritis reumatoide 
• Trastornos de la sangre: Personas con leucemia mielógena aguda, mielodisplasia o un trastorno mieloproliferativo.

Si usted tiene pioderma gangrenoso, no significa que tenga alguna de estas afecciones, pero su médico las considerará y tomará las medidas necesarias para excluirlas. 

¿Cómo se trata el pioderma gangrenoso?

Dado que el pioderma gangrenoso es raro, puede ser difícil de diagnosticar. A menudo, se pueden necesitar muchas pruebas para descartar otras causas. Una de esas pruebas puede ser una biopsia de piel, en la que se toma una pequeña muestra de piel para examinarla bajo el microscopio en un laboratorio.

Una vez diagnosticado, el tratamiento para el pioderma gangrenoso depende de la gravedad de las úlceras.

¿CÓMO cuido mi pioderma gangrenoso?

Para garantizar una cicatrización adecuada de la herida, considere implementar lo siguiente: 

• Optimización de la nutrición: El cuerpo necesita mucha energía de los alimentos ricos en proteínas para sanar adecuadamente.
  
• Deje de fumar: La nicotina reduce el flujo de sangre a la piel, lo que dificulta la cicatrización.
• Control glucémico: La nicotina reduce el flujo de sangre a la piel, lo que dificulta la cicatrización.

Su médico también recomendará apósitos apropiados para mantener el área de la herida limpia e hidratada. Asegúrese de seguir todas las instrucciones para cambiar los apósitos, a fin de evitar infecciones y promover la curación.

¿QUÉ puede suceder si el pioderma gangrenoso no se trata?

El pioderma gangrenoso que no se trata adecuadamente puede provocar infección, cicatrización, dolor intenso, depresión o pérdida de movilidad. Con ningún tratamiento o tratamiento limitado, pueden ocurrir retrasos en la curación o ninguna mejoría.

¿CUÁNDO debo comunicarme con mi proveedor de atención médica?

No espere ni dude en ponerse en contacto si: está experimentando nuevos problemas o síntomas, su herida comienza a sangrar excesivamente, o si ve algún signo de infección.

Signos de infección: fiebre, náuseas, enrojecimiento de la herida, calor, hinchazón, dolor o cambios en el drenaje, el olor o el color de la herida.

¿Cómo puedo prevenir el pioderma gangrenoso?

Si bien no existe una forma conocida de prevenir el pioderma gangrenoso, si ya sabe que tiene la afección, evite lesionarse la piel. Las lesiones o traumatismos en la piel, incluyendo la cirugía, pueden provocar la formación de nuevas úlceras.